El Parlamento Europeo ha reducido este martes el límite para las emisiones de CO2 de los nuevos vehículos comerciales ligeros que se vendan en la UE, que pasará de los 203 g/km actuales a 147 g/km en 2020. El texto, que ya ha sido acordado con los ministros de los Veintiocho, también reclama la introducción de procedimientos de ensayo más fiables a la hora de medir las emisiones contaminantes.
En este sentido, los fabricantes deberán producir suficientes modelos de furgonetas con bajo nivel de emisiones para compensar aquellos más contaminantes y cumplir, de este modo, con el equilibrio global de 147 g/km en 2020, bajo pena de sanciones.
Fin de los «supercréditos» en 2018
Para lograr sus objetivos, los productores de vehículos comerciales ligeros contarán con un sistema de «supercréditos», que otorga más importancia a los vehículos que emitan menos de 50 g/km. Este sistema ya existe pero no va a renovarse, por lo que expirará en 2018.
Procedimientos de ensayo más fiables
El texto adoptado pone en evidencia las lagunas de los actuales ensayos medioambientales, que los fabricantes han explotado para generar cifras de consumo y emisiones que son casi imposibles de conseguir bajo las condiciones de conducción normales del día a día.
Durante las negociaciones, los parlamentarios han obtenido el compromiso de la Comisión Europea de poner en marcha lo antes posible el procedimiento mundial de ensayo de vehículos ligeros (WLTP, por sus siglas en inglés) definido por la ONU.